Mauricio

Paraíso de largas playas de arena blanca y aguas cristalinas, vestigio del colonialismo y uno de los lugares más espectaculares para tu luna de miel. 

Costa Este

 la costa este acapara las playas más vírgenes de la isla, dónde el turismo de masas es escaso, y podéis disfrutar del increíble paisaje y de las lagunas. Aquí se encuentra la región de Morne Brabant, un lugar paradisíaco rodeado de un paisaje muy similar a la sabana africana en el que incluso descubriréis algunos cañones, vestigio de guerras entre ingleses y franceses. 

Costa norte

La zona más turística es la costa norte, en la que se concentran la mayor parte de los hoteles de lujo y desde dónde se organizan la mayoría de las actividades acuáticas. Es la zona en la que luce más sol durante todo el año, y la lluvia es menos abundante.

En esta costa podréis disfrutar de la playa de Grand Baie, en la que se asientan numerosos establecimientos hoteleros, o de la playa de Trou aux Biches, una larga playa muy familiar a la que los habitantes de Mauricio acuden en sus días de descanso.

Isla de los Ciervos

 Si decidís elegir Isla Mauricio como vuestro destino de luna de miel, no podéis dejar de realizar una excursión a la Isla de los Ciervos, dónde se encuentran las que muchos consideran las playas más bonitas de Mauricio. La Isla de los Ciervos es probablemente el lugar más romántico y agradable del país. Se sitúa frente a la costa este y se caracteriza por sus playas de intenso azul y su naturaleza salvaje. 

Paseos en Catamarán

Lo más frecuente es que los hoteles organicen viajes de un día en catamarán, que suelen incluir comida a bordo, baño en el mar y algo de snorkel. También se puede jugar al golf en el impresionante campo del que dispone o disfrutar de una buena comida en uno de sus muchos restaurantes. 

Deportes acuáticos

Gracias al viento constante y a las tranquilas lagunas, el windsurf y el kitesurf son deportes muy comunes. En los últimos años se ha puesto también de moda el padelsurf, que consiste en remar con una pala en pie desde una tabla de surf.

Por supuesto, el buceo y el snorkel son imprescindibles en Isla Mauricio. Debido al arrecife de coral que rodea la isla, la variedad de peces que se pueden observar es asombrosa. Por las claras aguas, es fácil contemplar la rica fauna sin necesidad de sumergirse demasiado.

Port Louis

Lo ideal es pasar en la isla una semana, para poder dedicar tres días al turismo y el resto a disfrutar del mar y descansar. Para ello lo mejor es empezar en Port Louis, la capital, fundada por holandeses. Os atraerá sin duda la mezcla entre la arquitectura colonial y los edificios más modernos, así como el espectacular paseo marítimo Caudan Waterfront. A sólo 11 km de Port Louis se encuentra el Jardín Botánico Pamplemousses, el más antiguo del hemisferio sur y una cita muy romántica. 

Templos del Grand Bassin

La naturaleza se cita en los templos del Grand Bassin, uno de los lugares más espectaculares del sur de la isla. Aquí se encuentran varios templos hindúes a los que acuden multitud de fieles durante todo el año, y que supone un auténtico choque cultural.